A estas alturas no voy a insistir en que hay un tipo de persona inútil, sucia y maliciosa, el Psicópata.
Hoy voy a hablar de una variedad de “borregos” que a veces, son aún más molestos.
El psicópata, sinónimo de “mala persona”, con frecuencia tiene aliados y tiene seguidores. Estos últimos son tan ridículos que, o bien, creen en la máscara que presenta el impostor, o bien son tan retardados que apoyan una causa sin conocer los hechos.
Aquí tenemos a las personas que están bajo el chapucero hechizo romántico-sexual del psicópata y que lo defienden en nombre de la gran excusa- chorrada “estar enamorado/a”.
También tenemos a quienes defienden al psicópata porque es lo politicamente correcto. Esta clase de mongoloides han recibido un lavado de cerebro efectivo y no tienen ni el coraje ni la capacidad, ni siquiera la voluntad de pensar por si mismos.
No olvidemos a las organizaciones que, dirigidas por psicópatas y sus secuaces, reciben dinero del estado por defender una causa supuestamente justa. Aquí tenemos a los que se autoproclaman defensores de la igualdad, la democracia, etc...etc....(si queréis os lo traduzco, defensores del odio y del fanatismo)....en Catalunya tenemos un buen ejemplo en el estilo de pensamiento y acción tipo secta de los Independentistas (eufemismo para retratar al ultranacionalismo) o a organizaciones contra la violencia machista (que acaban convirtiéndose en una Inquisición neofascista del s.XXI).
El/la psicópata, cuando están integrados en la sociedad, son los hipócritas y mentirosos por excelencia, pero lo peor es que siempre hay personas, que ya sea por ignorancia o por conveniencia, están dispuestos a defender a esa gentuza....poco saben ellos que, detrás de las palabras bonitas o el discurso victimista, el/la psicópata se rie de ellos a sus espaldas.
Cuando estás en desacuerdo con sus opiniones y actitudes, los secuaces y marionetas de los psicópatas, te llamarán maltratador, retrógrado, machista, nazi o asqueroso....una prueba de que ellos mismos son unos nazis, egocéntricos, narcisistas y despótas, ya que no aceptan ninguna opinión que no sea la suya propia, o sea, no admiten la libertad de expresión y pensamiento. Las leyes solo sirven para tí, pero ellos están por encima.
Para descubrir en qué lado hay que posicionarse, primero hay que conocer los hechos objetivos....pero parece que todo el mundo está dispuesto a apoyar una causa si te la han vendido los medios, sin importar si hay algo de verdad en ella.