PSICOLOGÍA OSCURA: EL ARTE DE LA MANIPULACIÓN
Por Daniel Pérez
(Imagen cortesía de Yomare en pixabay)
La psicología oscura extrae su nombre de la forma de pensar y actuar de las personas más “oscuras” entre nosotros, narcisistas, maquiavélicos, psicópatas (a los que se puede añadir un cuarto personaje nefasto, el sádico). En realidad se trata de las tácticas de persuasión, y sobre todo de manipulación y control mental que usan esas personas.
Estos sujetos no sólo crecen con un marcado talento y gusto por el engaño y la utilización de otras personas como objetos para sus fines, algunos de ellos, dedican cierto esfuerzo en aprender y mejorar sus tácticas.
Naturalmente, existen universidades, organismos, fundaciones y servicios de inteligencia, medios de comunicación, etc. que usan la propaganda, el adoctrinamiento cultural y la ingeniería social para cambiar la forma de pensar y sentir de las masas, en un auténtico lavado de cerebro encubierto...pero de éste tema, hablaré en otros artículos. Hoy, hablamos de individuos que funcionan con esa psicología oscura.
Estas personas conocen las estrategias generales a medio plazo y también las técnicas que deben usar en cada momento para conseguir lo que quieren. Básicamente, es crear un vínculo con su víctima mediante la creación de un papel (tras observar tus necesidades, crean un personaje ficticio para ti) y el uso de tácticas como el love-bombing (halagos y atenciones). Una vez conseguido usarán algunas de las tretas que veremos a continuación, a medida que vaya avanzando en éste artículo.
La psicología oscura bebe de muchas fuentes, aparte de la propia mentalidad de sádicos, maquiavélicos, narcisistas y psicópatas. Dos influencias importantes, que ayudan a entender cómo y porqué funcionan estas estratagemas, son:
-NPL (la programación neurolingüística), ya que psicópatas de todo tipo son especialistas en seducir mediante “anclajes”, o sea, llevando a cabo acciones que crean un vínculo a un estado emocional en sus víctimas.
-CONDUCTISMO (la rama de la psicología que se ocupa del comportamiento), ya que los seres humanos somos fácilmente moldeables por estímulos (ya sean aversivos o por contra, refuerzos positivos), se trata del condicionamiento clásico y el condicionamiento operante. De nuevo, toda clase de psicópatas usan acciones para cambiar la forma de pensar de sus víctimas, o para que hagan lo que pretenden.
Volvamos a un resumen de las personas oscuras:
Narcisistas: necesitan ser admirados, son egoístas, tienen una fantasía de grandiosidad y carecen de empatía
Maquiavélicos: Cínicos, manipuladores, intrigan en su propio provecho y no tienen moral
Psicópatas: Fríos, sin empatía ni remordimientos, simulan ser amigables y suelen ser encantadores
Sádicos: Sin empatía, a diferencia de los anteriores, no tienen objetivos concretos, lo que les motiva es el propio placer de dominar, humillar, dañar y disfrutar del dolor ajeno.
Veamos algunas de las tácticas favoritas de esta gentuza:
Halagos y atenciones - Se muestran afectuosos, amables y seductores para ganarse la confianza de la víctima
Mentira – Falsedades, exageraciones, historias inventadas
Mentira – Falsedades, exageraciones, historias inventadas
Retirar el afecto – Dar “frío y calor”, se muestran cariñosos y de repente dejan de serlo, crean el efecto parecido a quitarle la droga a un adicto
Silencio – Evitan a la víctima, la ignoran o le retiran su atención
Manipulación del lenguaje – Doble sentido, ambigüedad calculada, disonancia entre lenguaje verbal y no verbal, etc.
Refuerzo coercitivo- “Si no haces esto, habrá consecuencias negativas”.
Influencia subliminal – Uso de “anclajes” y otras técnicas de control mental
Inducir al cansancio – Las personas, cuando están agotadas física y mentalmente, aceptarán cualquier cosa. Esto puede hacerse mediante la exigencia de tareas y favores interminables y absurdos
Hay muchas más, las anteriores son sólo ejemplos.
Debemos tener en cuenta que algunas tácticas son usadas en muchos ambientes y profesiones, por ejemplo abogados, políticos, líderes/influencers, vendedores.
Hay una delgada línea entre la persuasión (la versión positiva, en la que se quiere convencer a otra persona, pero de forma abierta) y la manipulación (en la que se quiere dirigir a otra persona sin que esta sea consciente, de forma encubierta y contra su voluntad y sus intereses, a menudo implantando un “virus” en su mente).
La diferencia, como siempre, está en la intención, ¿se hace algo por el bien de otro o para aprovecharnos de él/ella?
Cuando hablamos de psicología oscura, estamos hablando, al fin y al cabo, de control mental y manipulación. Mucha gente cree que es inmune a ser manipulada, engañada o dirigida. Naturalmente, ese pensamiento mágico es irreal, porque es relativamente fácil manipular a alguien.
